Durante el invierno las comidas calientes abundan cómo un modo más de combatir la temperatura. La polenta es una tradición nacional y, como primera opción, Yelmo propone una reversión de la clásica receta: polenta con tuco y queso.
Ingredientes
150 gr de polenta
1 lt de leche (o mitad agua mitad leche)
50 gr de manteca
Sal y pimienta, a gusto
Lo que necesitás para el tuco:
1 cebolla
1 zanahoria
1 cda de azúcar
2 dientes de ajo
6 unidades de tomates perita maduros
Laurel, sal, pimentón, y pimienta, a gusto
Oliva o aceite de maíz, cant. necesaria
Queso parmesano rallado, a gusto
¡A cocinar! (1/2)
Disponer una sartén sobre el anafe para el tuco.
Agregar un chorrito de aceite y el ajo picado chiquito hasta apenas dorar.
Sumar la cebolla cortada en cubos pequeños, salar. Rehogar y agregar la zanahoria cortada en rodajas finitas.
Agregar los tomates cortados en cubitos, sin su centro ni semillas.
→ Deslizá para terminar la receta
¡A cocinar! (2/2)
Salpimentar y agregar la cucharada de azúcar, el pimentón y el laurel. Cocinar a fuego bajo hasta que el tomate comience a reducir y la zanahoria esté tierna.
Para la polenta, disponer en una olla la leche, salpimentar. Agregar la manteca.
Llevar sobre el anafe a fuego medio hasta romper hervor y agregar la polenta en forma de lluvia mientras mezclamos con batidor de mano o cuchara.
Cocinar la polenta unos minutos hasta que espese. Servir la polenta y terminar con el tuco y queso a gusto.