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Hay múltiples variantes de pisos para poder instalar en el hogar de cada uno, desde pisos flotantes, vinílicos, porcelanatos y hasta decks. En Pisos Alemanes están todas las variedades para poder ambientar de la mejor manera tu casa.

Pisos vinílicos

Ideales para el interior de tu hogar u oficina

Los pisos vinílicos con encastre son un tipo de revestimiento interior ideal para pisos o paredes. Se coloca sin pegar, clavar ni atornillar y se pueden apoyar sobre cualquier superficie, siempre que sea lisa, seca y nivelada. Son muy resistentes al alto tránsito y los impactos, y 100% resistentes al agua.
Son aptos para losa radiante y se instalan fácilmente sobre cualquier superficie existente, con una rápida obra en seco. Además, son fáciles de colocar y limpiar.

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Deck

El piso perfecto para el exterior de tu casa

Lo ideal de los pisos decks es que son perfectos tanto para interiores como exteriores, ideales para galerías, patios y terrazas. Originalmente eran pisos que se utilizaban para proteger la cubierta de los barcos y por su gran resistencia comenzaron a diseñarse para uso en tierra firme. Su mayor ventaja reside justamente en su durabilidad al aire libre, soportando el sol y el agua. Además, son de muy fácil instalación, pudiendo colocarse sobre otros pisos siempre que estén nivelados

Pisos flotantes

La facilidad de instalarlo sobre cualquier superficie

Los pisos flotantes son un tipo de revestimiento interior para pisos o paredes, que lo bueno de estos pisos es que se colocan sin pegar, clavar ni atornillar. Se pueden apoyar sobre cualquier superficie, siempre que sea lisa, seca y nivelada, además de ser pisos fáciles de limpiar y contar con resistencia a golpes, rayones, manchas y quemaduras.

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Porcelanato

Lo mejor para cualquier ambiente transitado

Los revestimientos perfectos tanto para exterior e interior, ideales para salones de venta y espacios públicos, además de poder aplicarse como revestimiento de paredes. Tienen tres veces más resistencia al desgaste que la cerámica tradicional y absorben una cantidad muy baja de agua, por lo que se los puede mojar sin que sufran daño o se manchen. Además, son fáciles de limpiar, sin requerir un mantenimiento especial, y se caracterizan por su larga durabilidad sin sufrir cambios en su aspecto original.